El próximo viernes, 25 de abril, el Real de la Feria de Abril se iluminará y darán comienzo así 10 días de baile y diversión dentro y fuera de las casetas instaladas en el Parc del Fòrum, a caballo entre Sant Adrià de Besòs y Barcelona. La principal novedad de la edición número 52 de la Feria es que, por primera vez, se cobrará entrada para acceder al recinto. Los organizadores lo justifican para garantizar la movilidad y la seguridad, y evitar así situaciones vividas los dos últimos años en las que se superó el aforo y se tuvo que cerrar el acceso a más público. La entrada de un día tendrá un coste de 3 euros, y habrá un bono de 12 euros para los 10 días de Feria. Los tíckets se podrán adquirir vía online, a través de la página www.feriadeabril.cat o en las taquillas instaladas en los accesos. Además, el día de la inauguración, el 25 de abril, y el lunes y martes 28 y 29 la Feria será de acceso libre. Además del cobro de la entrada, se incrementará el aforo hasta las 40.000 personas (el año pasado era de 31.000) y se reforzará la seguridad con un 23% más de personal en el control de accesos y en la vigilancia, así como la instalación de cámaras de seguridad y el aumento de la iluminación en todo el recinto.
El éxito de la zona village, donde poder comer y beber más allá de casetas y mesones, ha hecho que se vuelva a instalar este año. La empresa sevillana García Millán repartirá 14.000 raciones de gazpacho el domiengo 27 de abril. Y la emisora oficial, Radio Tele Taxi, tendrá caseta en la que se llevarán a cabo actuaciones y emisiones de sus programas en directo.
Un cartel con raíces mironianas
La presentación del cartel de la Feria, obra de Christian Fernández, se llevó a cabo este sábado en la Fundació Miró, y rinde homenaje al pintor por el 50 aniversario de la entidad. Para el autor, “en el proceso creativo, me sumergí en la fuerza visual, en la libertad compositiva y en la vibrante paleta cromática de Miró. Exploré profundamente su obra, sus formas abstractas, su audaz uso de colores
primarios, su simbología sencilla y poderosa. Busqué integrar estos elementos en un lenguaje visual propio, creando así un encuentro armonioso entre dos mundos aparentemente diferentes.
Técnicamente, el cartel fusiona lo figurativo con lo abstracto. La figura femenina, vestida con ecos del tradicional traje flamenco, cobra vida en formas sinuosas y libres que evocan la esencia creativa mironiana. El rojo, el amarillo y el azul rinden homenaje directo al legado cromático del artista, simbolizando pasión, alegría y la esencia del Mediterráneo. El contraste con líneas negras añade movimiento y fuerza visual, atrapando nuestra atención en un instante mágico.
El conjunto compositivo habla también de fiesta y convivencia: las estrellas, elemento recurrente en la obra de Miró, evocan sueños, ilusiones y la unión cultural que la Feria de Abril inspira año tras año. La flor roja no solo representa el flamenco; es también un estallido de vida, un guiño vibrante a la pasión tan presente en la obra del maestro. En definitiva, este cartel es mi manera poética y sincera de expresar cómo dos culturas, aparentemente lejanas, se encuentran y se enriquecen mutuamente. Es mi tributo personal a Andalucía, la tierra de mis padres y de mi alma, y a Cataluña, mi cuna y mi hogar.»

En la presentación intervinieron el director de la Fundació Joan Miró, Marko Daniel, el presidente de la Federación de Entidades Culturales Andaluzas en Cataluña (FECAC), Daniel Salinero, el concejal de cultura del Ayuntamiento de Barcelona, Xavier Marcè, y la subdelegada del Gobierno en Barcelona, María del Carmen García Calvillo.
Fotografías: Manuel Arce